«Los últimos datos aumentarán la preocupación por la gran posibilidad de estanflación», ha señalado Paul Smith, economista de S&P Global Market Intelligence.
No obstante, el experto ha destacado que las lecturas de inflación
de los precios cobrados y de los precios pagados han registrado en junio reducciones notables respecto del mes anterior, aunque en ambos casos permanecen en niveles históricamente elevados.
Como parte de los constantes esfuerzos por evitar el aumento de precios y la escasez de productos, las empresas continuaron aumentando sus stocks.